sábado, 10 de octubre de 2009

¡Que alguien mate al black metal ya!

Sinceramente cada día encuentro menos motivación para escribir o comentar discos de Black Metal. Me resulta casi una carga pesada el tener que hablar y tratar una escena, que lamentablemente me importa bastante poco en la actualidad. Y es que pienso que el black metal esta mas que muerto, rematado, y bien rematado. Lo mejor que puede sucederle por dignidad a un pasado glorioso es que alguien lo entierre de por vida.
Faltan ideas, sobran millones de bandas, y sobre todo falta carisma y autenticidad. Ese carisma y esa autenticidad, que le hicieron despegar como algo casi místico en los años 90. Tristemente hoy todo es muy diferente a como lo fue en sus comienzos, y al igual que el death metal necesitó de un saneamiento de años, el black metal no solo lo necesita, si no que lo esta pidiendo a gritos. A diferencia de lo que ocurrió con el death , cuyo testigo lo pillo el black metal a principios / mediados de los 90. Actualmente no existe un testigo “nuevo” musical para relevar al black. Y es ahí donde reside uno de los auténticos problemas. Nacen miles de estilos musicales, creo que si algún estilo musical ha tenido mas ramificaciones ha sido precisamente el black metal. Tenemos trollish metal, forest metal, pagan metal, goat metal, brutal black metal, viking metal, occult metal, NS black metal, war metal, totalitarial metal bla bla bla. Todo es lo mismo con distintas caras, letras y riffs. Cuando todas estas bandas recurren a su inspiración y bandas clásicas, nombran a bandas de los años 90. Y es que todas esas bandas viejas, no han conseguido ser superadas en carisma, calidad musical, y espíritu por ninguna.
Hoy en día, algunos amigos me recomiendan bandas, las escucho, y no siendo absolutamente nada. Es una banda mas de las 900000000000 bandas que se pueden encontrar por Internet. No están mal, es cierto. Pero no me aporta nada nuevo, ni musical, ni en espíritu, ni en arte. Normalmente son burdas copias de los grandes clásicos, pero sin ese “saber hacer las cosas” que se tenia antes. Digamos que es un intento de; Quiero ser, pero no puedo. Me entenderéis mejor, si os digo que no ha existido un – Under a funeral moon en la primera década del 2000. No ha existido un A blaze in the northern sky, ni un Diabolical Fullmoon and Mysticism, o Thousand Swords.. solo por poner algunos ejemplos conocidos. Todas las bandas actuales, miran esos discos como referencia, pero ninguna ha conseguido pasar al salón de la gloria, ni lo conseguirán. Hay muchas bandas buenas que bajo mi punto de vista, si que han conseguido tener un carisma personal suficiente, como para poder catalogarse de “arte”. Y me estoy refiriendo a las que para mi han sido mejores bandas “modernas” de black metal; Warloghe y Katharsis. Solo dos bandas entre un mar de millones de nombres. Las demás han aportado buena música, pero les ha faltado ese “carisma” que solo tienen los genios, para hacer que algo sea magnifico e influyente en generaciones venideras.

Por todas estas razones, y algunas mas, creo que lo mejor que le puede pasar al black metal es que prescindamos de el. O bien que hagamos una purga regresando: al ser mas exigentes con lo que consumimos. Ya que me da la impresión precisamente, de que en la actualidad el black metal no es ni mas ni menos que un consumo, fruto de una sociedad consumista y globalizadora, que únicamente consume, sin ser exigente realmente con lo que esta consumiendo.
Siendo realista, pienso que no existe una vacuna contra este Ragnarok musical, el cual terminara ahogándose en la propia mierda que el mismo ha creado. Y es que hemos pasado de ser un movimiento elitista, a ser un movimiento para masas que se autodefinen elitistas. Y digo elitista, ya que en los años 90, todo el mundo que accedía al black metal, era por medio de un camino de sacrificio, entrega y aprendizaje. Que finalmente le condicua a las músicas extremas y underground. No se podía acceder al black metal, si antes no se había pasado por diferentes niveles musicales. Hoy no es así, y llegar a cualquier banda, es tan fácil como teclear un nombre en la pantalla de un pc. Nos queda por tanto tan solo una opción, y esta no es otra que la de regresar a ser exigentes, para así purgar una escena que esta en periodo de muerte.
Resulta gracioso, ya que el elitismo de hoy en día, es básicamente una pose. Una pose de malo sacada de modas, camisetas, vinilos, discos, y actitud de pandillero cual rapero en película de negros de New York. El “elitismo” de antes, se basaba en el conocimiento y el trabajo, siendo por tanto un núcleo cerrado. No por que fuera cerrado en si, si no por la dificultad de acceder a el. Hoy en día es todo lo contrario, y el “elitismo” se basa mas que en el conocimiento y en la calidad, en las posturitas que saquemos en las fotos, nuestra camiseta a la ultima moda de Watain, o la cara de malvado que tengamos en tal o cual concierto.
Por todas estas y mas razones, pienso que el black metal, por dignidad, tendría que cerrar sus puertas y desaparecer del top 100 unos años. Sanearse, y recuperar una generación, que con el paso del tiempo, descubra bandas olvidadas en su actualidad. Y recupere así ese espíritu underground elitista, basado en el conocimiento y difícil acceso, y no en las camisetas. Aun cuando por otra parte, para conseguir esto, tendríamos que dinamitar el mundo de Internet.

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