martes, 6 de octubre de 2009

El Baphomet templario

El Sector de los iniciados templarios llego a establecer estrechos vínculos con las fuerzas del mal; por ello, concibieron un rostro que, al tiempo de elevarle sus plegarias, sirviera de puente con el príncipe de las tinieblas: Lucifer. Este ídolo no era otro que el mítico Baphomet.
Los templarios estudiaron escrupulosamente las sagradas escrituras, con el único fin de comprender mejor la profundidad de Lucifer, el ángel caído para la iglesia. Para ello, como recuerda Gastón Vlerc, ahondaron en los conceptos cabalísticos, priscilianistas, gnósticos y paganos, fueran de procedencia semita o helenística, alcanzando la misma conclusión: La afirmación precisa sobre el mundo de las tinieblas para anhelar con mayor ímpetu la luz del señor: Ut intelligentes tenebras desideremus lucem domini ( Los que hemos conocido o practicado, las tinieblas deseamos la luz del señor).
De todos los símbolos esotéricos relacionados con el Temple, posiblemente fue el baphomet el que mas quebraderos de cabeza le dio a los sectores mas ortodoxos de la iglesia oficial. Se trata de una extraña cabeza cortada, elemento que hunde sus raíces en ancestrales ritos protohistóricos, tanto en Oriente como en Occidente, como lo confirman los cultos paganos a la maléfica medusa en la cultura Griega, capaz de matar a quien la mirara fijamente a sus ojos; Osiris, en el antiguo Egipto; Al Odin germanico; o a Orfeo y Perseo, ya en la civilización helénica clásica. Un rostro que, sorprendentemente, era capaz de responder a preguntas cabalísticas, en relación con el futuro, basándose en un sistema binario formado por dos cifras. Los templarios solían llevar colgada al cuello esta cabeza en pequeño, en forma de amuleto protector, al igual que sus contemporáneos cataros. En la localidad Navarra de Arnotegui, cerca de Eunate, se mantiene un rito ancestral que hunde sus raíces en la época templaria. Se trata del culto a la cabeza relicario de San Guillermo, la cual durante la semana de Pascua, tras ser paseada en procesión , recibe en su interior el vino y el agua, líquidos relacionados con la sangre de Cristo, que se convierten en medicinas para múltiples remedios.


Se dice que algunos caballeros, al ser torturados por la inquisición, manifestaban que la sola contemplación de este enigmático rostro era tan insoportable que, al igual que el Grial, producía la muerte. Pero no se trataba de una muerte física, sino de un fallecimiento iniciatico que llevaría, si todo se había desarrollado según los preceptos establecidos por la orden, a un renacimiento.
Pero el problema sobre la interpretación de este rostro también se extiende a la etimología del mismo. El termino Baphomet podría guardar una estrecha vinculación con el bautismo del inteligencia, si se confirmara su vinculación con las voces griegas afrancesadas de Baphe y metis. Otros investigadores, en cambio, apoyan la vinculación con la palabra –Baal-Phomet, termino de los pueblos del Mediterráneo oriental relacionado con los titos dionisiacos, o de Dionisios, el dios del vino en la civilización griega. Y, mas moderadamente, hay quienes hacen derivar baphomet de las palabras francesas ubat y fumet (boca del padre); con lo cual, volveríamos al rito que los caballeros debían realizar en las ceremonias de iniciación a los niveles mas secretos. Mas que un ídolo, por lo tanto, el Baphomet, uno de los mayores enigmas de la mitológica templaria, es un rito. Según Louis Charpentier, la palabra baphomet es el resultado de una acumulación de símbolos vinculados con la alquimia; se trata de una meditación colectiva dirigida sobre tales símbolos y su significado. También habría que buscar las raíces de este esotérico rostro en las tradiciones antiguas griegas. Para el barón Hammer Pierstall, orientalista alemán, el termino baphomet, deformación de bafe, equivale a baño; mientras que met derivaria de meteos, en clara procedencia del espiritu helenico, que se traduce por iniciación del espiritu. Por lo que es fácil llegar a la colusión de que el Baphomet supondría un símbolo agnóstico de un “bautismo de fuego espiritual”, por inmersión, lo que nos llevaría a los orígenes del bautismo en las culturas mediterráneas. También se establece una estrecha correspondencia con la fiesta templaria del Pentecostés, en la cual los caballeros celebran el “bautismo apostólico espiritual para los iniciados”, pero no con agua, sino con fuego, el baño ígneo que , como sentencia Rafael Alarcón, remplazaba al bautismo con agua de los cristianos entre agnósticos. El mismo trovador alemán Wolfram von Eschembach, en su magistral obra grialica Parzival, denomina bautizados a los caballeros custodiosos del santo Grial. Existe un común denominador en todas estas relaciones; incluso Gerard de Sede llega a afectuar una estrecha conexión entre Baphomet y la luna, a traves de un simbolismo alquimista implícito, ya que nuestro planeta se relaciona con la plata, que seria la fase alquimista que sucede al migredo. Con lo cual alcanzamos lo que Fucanelli y Louis Charpentier señalan como la dualidad, es decir el andrógino, otro símbolo de la piedra filosofal, y de aquí al doble rostro de la divinidad Jano, que es claramente baphometica. En el corazón del valle cantabro de la Liébana, se alza el pico de Jano, montaña sagrada para los pueblos de la antigüedad, en cuya cumbre se rendía culto a las divinidades masculinas del panteón celta hispánico, y en las cuevas a las divinidades femeninas. Muy cerca se encuentra el santuario de Santo Toribio , donde se conserva el Lignum vía, el mayor trozo de madera de la cruz de Cristo. Toda la zona esta cargada de energía y fuerzas de poder, por lo que no es nada extraño que los templarios tuvieran allí una notable presencia.
El Baphomet templario debe leerse al revés TEMOHPAB, símbolo de las palabras latinas Templi Ommun Hominun Pacis Abbas.
Se dio el caso durante numerosos procesos de tortura, de que muchos caballeros templarios llegaron a cambiar la figura del baphomet por la de un gato, felino que igualmente siglos después terminaría siendo besado durante las soporíferas sesiones de autos de fe que la inquisición llevo a cabo contra las brujas. Este sutil animal, relacionado con las sombras de la noche y de la independencia, gozo de una especial devoción en el antiguo Egipto. Sin embargo, durante los siglos medievales, fue considerado por la iglesia la reencarnación del diablo. De nuevo, aquí encontramos una estrecha vinculación entre los templarios y la brujería; es preciso recordar que el temple se asento con el pleno conocimiento de ello, en aquellos enclaves fuertemente cargados de fuerzas “malignas”, según la iglesia oficial. Montserrat, por ejemplo calificado como el lugar de residencia de la reina de las brujas, desde el siglo II, mil años después seria ocupado por los templarios.
El baphomet es, al mismo tiempo una figura venerada por los templarios, vinculada con los conceptos quiméricos del arte medieval. Mezcla de ser andrógino, figura satánica, monstruo, ídolo etc etc etc, en el la zoología fantástica nos lleva hacia concepciones aterradoras de la otra dimensión, basadas en el conocimiento de las fuerzas del mas allá, que solo un grupo escogido de estos caballeros tenia la capacidad de entender: El Baphomet esta reproducido en numerosos lugares de la geografía templaría hispana. Entre ellos, podemos destacar la figura negruzca de piedra y granito que sobresale de la fachada de la iglesia de Puebla de Sanabria (Zamora); la extraña figura de la zona superior del ábside de la iglesia parroquial de la Asunción, en la localidad de Rafales (Teruel).
En Caracena, en el corazón de las parameras sorianas, el pueblo maldito del sur de esta provincia castellano leonesa, en un canecillo del exterior del ábside de la iglesia románica de San Pedro, aparece un baphomet burlesco, que muestra una horripilante sonrisa que se despliega en su triple rostro, formado por tres narices, cuatro ojos y una boca dentada común. También la ciudad de Soria y su provincia cuenta con un personaje muy querido y venerado, San Saturio, un santo barbado de extraños orígenes, de color negro, que muchos investigadores vinculan con un baphomet templario. El mismo templo en donde se le rinde culto, a poca distancia de la capital, es rupestre y se asoma al meandroso curso del Duero, por lo que volvemos a encontrarnos con las rocas y también con el agua. Y, sin salir todavía de esta esotérica tierra soriana, en la localidad de Omeñeca, un rostro de inspiración celtica domina el frontal de la fuente de la plaza; rostro que nos recuerda los titos protohistoricos de las cabezas magicas, que sin duda, sirvieron de modelo a los baphomets templarios. En esta zona, además se extienda la sierra del Almuerzo, que según las tradiciones medievales, fue el escenario de la leyenda de los siete infantes de Lara. Sus cabezas cortadas se convirtieron en reliquias, junto con una copa mágica – El grial - , elaborada tras la fundición de los collares de oro de los legendarios personajes castellanos, y fueron adoradas en un arca, evocando nuevamente a las cabezas de los baphomets templarios.
En el castillo templario de Benifallin , sobre la ladera oriental de la sierra dels Plans, los caballeros de la cruz pateada se valieron de Satanás para que este anunciara a los campesinos de la zona la llegada de las benefactoras lluvias.

2 comentarios:

  1. Padrisima historia ... sin embargo muchos historiadores estan convencidos que la supuesta adoración a Baphonet de parte de los templarios fue un invento de los inquisidores y que tal veneración fue arrancada bajo crueles torturas. De hecho el ultimo gran maestre Jacques de Molay, se retracto de todo en la hoguera, y lanzo maldiciones al rey de Francia, el inquisidor y al papa Clemente V, todos murieron ese mismo año de su ejecución. Ademas, hace muy poco en el Vaticano se encontro un pergamino donde se comprueba que Clemente V, ya habia firmado una orden de perdon para Jacques y su orden, pero ya no la alcanzo a publicar debido a su ejecución. Pero ese papel pretende exculpar a la orden templaria y de hecho se pide perdon a la misma.

    Saludos.

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  2. bueno, al parecer no tienes idea de lo que hablas no...?
    para empezar, baphomet no era ni por si a caso un demonio, o algo "satanico" (que por cierto no tiene nada de demoniaco el ser satanico, dado que satan en realidad quiere decir "enemigo") baphomet era un dios pagano, el dios de la virilidad...tu dios si fueses pagano, y como la "Santa" iglesia, iba ganando poder, calumnio a los templarios y a baphomet, cuyo signo es un pentagrama volteado.
    Los templarios, al igual que los masones, o los caballeros rosacruces, no tienen ni un pelo de satanismo...! el que gente como TU no este en ella, y que tengan secretos, no quiere decir que sea malo!! asi que si fueses tan amable, de cambiar todas las mentiras que escribiste de baphomet y de los templarios...
    gracias

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